El Gobierno reafirmó este jueves su postura de mantener el equilibrio fiscal como condición innegociable en el marco de las conversaciones con los gobernadores por el Presupuesto 2025. “Estamos abiertos a toda discusión presupuestaria que haga falta y a toda conversación sobre cambios en las partidas. Lo único que no es negociable es el equilibrio fiscal. Si quieren romperlo, no hay problema, seguimos con el Presupuesto del año anterior”, aseguró el vocero presidencial Manuel Adorni en conferencia de prensa, marcando una línea clara en el debate.
El oficialismo enfrentó dificultades esta semana al suspender abruptamente la reunión de la Comisión de Presupuesto convocada para el martes. Según trascendió, el presidente de la comisión, José Luis Espert, decidió posponer el encuentro debido a la falta de consenso. “La voluntad de esta comisión y del Ejecutivo encabezado por Javier Milei es seguir trabajando para lograr los consensos necesarios. Si en las próximas semanas hubiera avances, el Ejecutivo evaluará la posibilidad de convocar a extraordinarias para su tratamiento”, señaló Espert en un breve comunicado desde el Salón de Pasos Perdidos.
La negociación con los gobernadores se centra en cinco puntos clave, incluyendo las deudas por cajas previsionales, la devolución del 1,9% de los impuestos coparticipables y la distribución del Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN). Según fuentes cercanas a los mandatarios provinciales, el pedido se limita a que el Ejecutivo cumpla con partidas ya establecidas por ley, sin comprometer el equilibrio fiscal. Sin embargo, el oficialismo ha rechazado propuestas alternativas, como recortar beneficios fiscales en sectores específicos para financiar los ajustes solicitados. Ante la falta de acuerdos, crece la posibilidad de que se prorrogue el Presupuesto 2023, una opción que los gobernadores intentan evitar.
El debate sigue dejando posiciones enfrentadas y un escenario incierto para las próximas semanas. La expectativa ahora se centra en si las partes lograrán acercar posiciones o si el Gobierno optará por mantener su postura de no convocar a sesiones extraordinarias, prolongando el estancamiento en el tratamiento del presupuesto.