San Miguel obtiene línea de crédito clave para afrontar vencimiento de US$ 53 millones y evitar default

El mercado sigue mostrando sensibilidad ante la sucesión de defaults empresariales que comenzó en 2024 con compañías del agro, como Los Grobo, y se extendió en 2025 con casos como Celulosa Argentina, GEMSA y Aconcagua Energía. En este contexto, San Miguel, una de las principales procesadoras de limón del mundo con alrededor del 15% de participación global, enfrenta un vencimiento millonario que generó preocupación entre sus acreedores y el mercado financiero.

La empresa, controlada por las familias Miguens Bemberg y Otero Monsegur, debe pagar aproximadamente 53 millones de dólares el próximo jueves por Obligaciones Negociables que aún mantiene en circulación tras un proceso de recompra. Sin embargo, según la calificadora FIX SCR, afiliada a Fitch Ratings, San Miguel contaba a mayo de 2025 con solo 36 millones de dólares en fondos disponibles, lo que hacía incierto el cumplimiento del pago. Ante esta situación, el martes la compañía anunció que “ciertos accionistas que integran el grupo de control o personas vinculadas a ellos” le otorgaron una línea de crédito sindicada por 15 millones de dólares, condicionada a determinados requisitos, que representó el último recurso tras no haber logrado captar esos fondos en el mercado.

La línea de crédito podrá renovarse automáticamente cada seis meses hasta un máximo de 48 meses, y contempla la posibilidad de que los prestamistas opten por capitalizar la deuda, convirtiendo el crédito en acciones ordinarias clase B y/o preferidas, al precio promedio de los últimos diez días hábiles anteriores al desembolso. “La línea ratifica los planes de la empresa y busca diversificar las fuentes de financiamiento y eventualmente mejorar su estructura de capital”, explicaron desde San Miguel. En caso de que los accionistas decidan no capitalizar, el préstamo deberá devolverse en un único pago al final del plazo acordado, con una tasa que será la mayor entre un 9,5% nominal anual fija o la suma del Secured Overnight Financing Rate (SOFR) más 520 puntos básicos.

La deuda neta total de San Miguel a marzo ascendía a 227 millones de dólares, y ya en septiembre de 2023 los accionistas le habían prestado 45 millones que luego fueron convertidos en acciones. En cuanto a su modelo de negocio, la empresa concluyó recientemente una reconversión estratégica, pasando de la fruta fresca a un enfoque en limón y derivados industriales, que ofrecen “mayor valor agregado, menores necesidades de capital de trabajo y menor variabilidad de ingresos, manteniendo un perfil netamente exportador”, indicó FIX. Además, la compañía inauguró nuevas plantas procesadoras en Uruguay y Sudáfrica, apostando a fortalecer su presencia global.