La Cámara Nacional Electoral (CNE) abrió un nuevo capítulo en la disputa por la reimpresión de las boletas únicas para los 14 millones de electores bonaerenses, al solicitar la opinión del fiscal federal Ramiro González. La consulta se produjo luego de que la Junta Electoral Nacional de la provincia rechazara el pedido de La Libertad Avanza (LLA), al considerar que “jurídica y operativamente” era imposible volver a imprimir el material de cara a las elecciones del 26 de octubre. La decisión de la Junta se inscribe en un escenario electoral en el que la renuncia de José Luis Espert, ocurrida hace una semana tras el avance de la investigación por sus vínculos con Federico “Fred” Machado, obligó al Gobierno nacional a rediscutir la integración de la lista y la pertinencia de imprimir nuevas boletas.
La controversia creció en los días posteriores, especialmente luego de que los jueces Santiago Corcuera y Daniel Bejas, integrantes de la Cámara Nacional Electoral, revocaran el fallo del juez Alejo Ramos Padilla que impedía a Diego Santilli encabezar la lista. Con esa resolución, Santilli quedó habilitado como primer candidato de LLA, desplazando a Karen Reichardt, quien figuraba en las boletas ya producidas. El cambio reavivó la discusión sobre si resulta viable reemplazar las boletas en todo el territorio bonaerense, un proceso que requiere trabajar con seis imprentas y distribuir el material en más de 40 mil establecimientos de votación. En el Gobierno insisten en que la reimpresión es necesaria para evitar confusiones y garantizar la validez de la oferta electoral, mientras que LLA sostuvo en su apelación que el cronograma propuesto “es de posible cumplimiento”.
La Junta Electoral Nacional de Buenos Aires, conformada por Ramos Padilla, el presidente de la Cámara Federal Jorge Di Lorenzo y la titular de la Corte provincial, Hilda Kogan, rechazó inicialmente el pedido de reimpresión al considerar inadecuados los plazos. Sin embargo, tras la presentación de la apelación, la Cámara Nacional Electoral recibió el expediente para resolver el planteo, aunque su presidente, Daniel Bejas, decidió devolver las actuaciones al señalar que faltaba un paso procesal: solicitar la opinión de las fuerzas políticas involucradas. Una vez cumplida esa instancia, el fiscal González recibió formalmente el pedido de dictamen la noche del sábado, según confirmaron fuentes judiciales. Se espera que el Ministerio Público Fiscal responda dentro de las próximas 24 horas.
El debate no es menor, dado que el propio ministro del Interior, Lisandro Catalán, advirtió que la reimpresión completa de las boletas demandaría un gasto de 12.169.655.000 pesos. Además del costo, el tiempo es un factor decisivo: la distribución, el control de calidad y la logística deben completarse antes del 26 de octubre, algo que para la Junta está fuera de los márgenes razonables. No obstante, desde LLA insisten en que el operativo es viable y señalan que las imprentas y los procesos necesarios ya están identificados. Mientras tanto, en la Justicia electoral reconocen que, de aprobarse la reimpresión, el calendario será extremadamente ajustado. La resolución de la Cámara Nacional Electoral, una vez que cuente con el dictamen fiscal, definirá si las urnas bonaerenses tendrán nuevas boletas con la imagen de Santilli o si se mantendrán las que aún llevan el nombre de Espert.
