Una controversia se desató esta semana en la provincia de Buenos Aires por la utilización de libros con contenido sexual explícito en las aulas, como parte del programa de Educación Sexual Integral (ESI). La vicepresidenta, Victoria Villarruel, se sumó rápidamente a las críticas, arremetiendo contra el gobernador Axel Kicillof y exigiendo que se retiren esos libros de las aulas. “Los bonaerenses no merecen la degradación e inmoralidad que Axel Kicillof les ofrece”, afirmó Villarruel, quien también hizo un llamado a respetar “la inocencia de los niños” y a frenar la sexualización en las escuelas.
En un post en su cuenta de Instagram, la vicepresidenta publicó fragmentos de la novela Cometierra de Dolores Reyes, uno de los libros en cuestión, que, según ella, se estaba utilizando en las aulas de la provincia. “Sacó su pija por encima del bóxer y me la acercó a la boca. Me dejé llevar a un beso tan suave como si lo que besara fuese una lengua”, cita Villarruel, señalando lo explícito del contenido. “Perdonen lo explícito pero esto no es educación y los padres no deben permitir que se sexualice a sus hijos”, se disculpó la vicepresidenta al compartir el pasaje, subrayando que el texto contenía “palabras vulgares que rozan lo pornográfico”. Además, añadió: “¡Dejen de sexualizar a nuestros chicos, saquen de las aulas a los que promueven estas agendas nefastas y respeten la inocencia de los niños! ¡¡Con los chicos NO!!”.
El libro Cometierra, que es una novela que aborda temas de violencia y el descubrimiento de un “don” en su protagonista, ha sido criticado por varios padres que consideran que no es adecuado para los jóvenes. “No todos los chicos están preparados para entender lo que es el coito, mucho menos el sexo oral o anal”, comentó una madre de un alumno de cuarto año. Sin embargo, la polémica se intensificó cuando Villarruel citó una de las páginas más polémicas del libro, la número 111, para ilustrar su punto. La publicación causó revuelo, ya que muchos padres tomaron capturas de pantalla para cuestionar la idoneidad del texto en el marco de la Educación Sexual.
La respuesta del gobierno provincial no se hizo esperar. Alberto Sileoni, director general de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, defendió el uso de los libros en una entrevista con Urbana Play. “Esos libros tienen una guía que, si le interesa, se la puedo hacer llegar. Son libros para la Educación Secundaria, son libros para la Educación Superior”, explicó Sileoni, quien aclaró que los textos no son entregados directamente a los estudiantes, sino que están destinados a las bibliotecas escolares y acompañados de guías docentes que orientan su uso. Además, destacó que “son libros que van muy explicados en la guía” y que, aunque puedan contener escenas de sexo y vocabulario vulgar, su inclusión en el currículum tiene un respaldo pedagógico para asegurar una interpretación adecuada del contenido por parte de los educadores.