El Gobierno nacional quedó en el centro de una fuerte controversia tras publicar un video oficial para conmemorar el 12 de octubre, en el que reivindica la llegada de Cristóbal Colón como el inicio de un “proceso de civilización, orden y progreso”. El corto, compartido desde la cuenta de la Casa Rosada en X, se aparta del sentido establecido desde 2010 para esta fecha, cuando el Día del Respeto a la Diversidad Cultural sustituyó a la antigua denominación de “Día de la Raza” mediante un decreto firmado por Cristina Fernández de Kirchner. Aquella normativa remarcaba que la fecha debía tener “un significado acorde al valor que asigna nuestra Constitución Nacional y diversos tratados y declaraciones de derechos humanos a la diversidad étnica y cultural de todos los pueblos”.
En el video, la Casa Rosada asegura que Colón se encontró con “pueblos enfrentados y costumbres que incluían rituales sangrientos, señales de un mundo sumido en la barbarie”, y sostiene que su expedición inauguró un proceso que “estableció las primeras estructuras sociales y políticas fundamentadas en el derecho, la fe cristiana y los valores occidentales”. La pieza concluye con una afirmación categórica: “La civilización prevaleció sobre el salvajismo y el orden sobre el caos”, para luego convocar a honrar “el legado que tanto costó construir”. La difusión del material no tardó en generar críticas de sectores académicos, organizaciones indígenas y referentes políticos, que consideraron que la comunicación del Ejecutivo desconoce el sentido actual de la conmemoración y reproduce una lectura eurocéntrica de la historia.
La postura oficial también se reflejó en el mensaje publicado por la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien optó por celebrar el concepto de “hispanidad”. “En este día quiero rendir homenaje a nuestra raíz hispana, que nos une con millones de hombres y mujeres a lo largo de Iberoamérica”, expresó en X, y añadió: “La Hispanidad es la herencia común que nos dio tradiciones, valores y el orgullo de sabernos parte de una gran comunidad”. El Gobierno de Javier Milei ha dejado de utilizar en sus comunicaciones la denominación Día del Respeto a la Diversidad Cultural y retomó abiertamente el término “Día de la Raza”, lo que alimentó el debate sobre el enfoque histórico que busca instalar.
En contraste, el gobernador bonaerense Axel Kicillof eligió marcar distancia con un mensaje que reivindica los principios instaurados en 2010. “Vamos a seguir defendiendo la diversidad y el respeto por los derechos de todas las comunidades que forman parte de nuestra identidad”, publicó en X, poniendo el foco en la pluralidad cultural y en el reconocimiento de los pueblos originarios. La controversia reabrió discusiones sobre la narrativa histórica que debe promover el Estado: mientras el Poder Ejecutivo nacional insiste en resaltar la herencia hispánica como un factor unificador y civilizatorio, otros sectores subrayan la necesidad de una mirada inclusiva que contemple las experiencias, memorias y derechos de todas las comunidades que habitaron y habitan el territorio argentino. El sentido del 12 de octubre, lejos de saldarse, volvió así al centro de la disputa pública.