Javier Milei retomará en junio su agenda internacional con un ambicioso viaje que incluirá escalas en Jerusalén, Roma, Madrid y Niza. Luego de algunas semanas con sus giras suspendidas —en gran parte por el enfoque de Karina Milei en el armado electoral—, el presidente argentino busca volver al plano internacional con una serie de encuentros de alto perfil político y diplomático. Entre ellos se destacan una nueva reunión con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y una audiencia con el papa Francisco el próximo 7 de junio, que marcaría el primer encuentro entre el pontífice y un presidente latinoamericano desde su asunción.
El itinerario aún no está completamente cerrado, pero fuentes diplomáticas aseguran que incluirá también la recepción del Premio Génesis —conocido como el “Nobel judío”— en la Knéset de Israel. “El premio de un millón de dólares de Milei será donado a programas que fomenten que países de América Latina desarrollen lazos más estrechos con Israel”, informaron desde la Fundación del Premio Génesis. Además, se contempla una participación en la Tercera Conferencia sobre el Océano, invitado por Emmanuel Macron en Niza, y un reconocimiento en Madrid otorgado por la Fundación Club de los Viernes. Esta última organización ya había anunciado la entrega del galardón Escuela de Salamanca, inicialmente prevista para marzo y suspendida tras los disturbios en el Congreso argentino.
La visita a Netanyahu, prevista entre el 9 y el 12 de junio, genera particular atención por su simbolismo político. “Es su aliado, no hay dudas”, señalan desde el entorno presidencial, en línea con las reiteradas manifestaciones públicas de afinidad de Milei hacia el líder israelí y Donald Trump. Sin embargo, el viaje ocurre en un momento crítico de la ofensiva de Israel en Gaza, condenada por varios gobiernos europeos. Mientras crecen las críticas por las víctimas civiles, especialmente entre niños, Milei se ha mantenido firme en su respaldo al gobierno israelí, sin cuestionamientos al accionar de Netanyahu.
En ese marco, se espera que el presidente argentino firme un memorándum de entendimiento con Israel para reforzar la cooperación en materia de defensa, seguridad e inversiones. “Reafirmando los valores de la libertad, la democracia y la lucha contra la discriminación y el antisemitismo”, aseguran desde la diplomacia argentina. También podría haber un anuncio sobre un vuelo directo entre Tel Aviv y Buenos Aires, una de las metas centrales del embajador Axel Wahnish. Además, Milei prevé reunirse con familiares de rehenes argentinos en manos de Hamas, como parte de su agenda en Jerusalén, donde también se espera que brinde un discurso ante la Knéset, gesto reservado solo a mandatarios distinguidos.
El cierre del periplo en Roma fue gestionado por el canciller Gerardo Werthein, quien confirmó que el papa Francisco recibirá a Milei en el Vaticano. La visita se produce en un contexto de tensiones políticas internas y mensajes eclesiásticos críticos al estilo presidencial. En el Tedeum del 25 de mayo, el arzobispo Jorge García Cuerva advirtió sobre la descalificación y la agresión permanente en la vida pública: “Hemos pasado todos los límites”. El mensaje no fue respondido por el oficialismo, aunque marca un telón de fondo significativo para un encuentro que muchos consideran histórico.