La diputada nacional Lilia Lemoine, de La Libertad Avanza, generó controversia al expresar su apoyo al ex senador estadounidense Joseph McCarthy, conocido en la década de 1950 por liderar la persecución de comunistas en Estados Unidos durante la Guerra Fría. La figura de McCarthy es recordada por sus audiencias a puerta cerrada en el Senado, donde presionaba a los sospechosos de simpatizar con el comunismo, conduciendo a muchas personas a perder sus empleos y reputaciones. En ese contexto, McCarthy promovió una “caza de brujas” que afectó a funcionarios públicos, artistas, intelectuales y ciudadanos comunes, con consecuencias devastadoras para miles de vidas.
El respaldo de Lemoine a McCarthy llegó días después de que el presidente Javier Milei destituyera a Diana Mondino de su cargo en la Cancillería por apoyar una resolución a favor de Cuba en la ONU. En sus redes sociales, la diputada publicó una imagen de McCarthy en una sesión del Senado, rodeado de banderas estadounidenses y sosteniendo unos papeles. La leyenda de la foto destacaba: “El controvertido senador McCarthy se volvió una celebridad cuando aseguró tener una lista con 205 espías soviéticos que trabajaban en el gobierno de Estados Unidos”. Acompañando la imagen, Lemoine cuestionó: “Pero… ¿qué hizo McCarthy REALMENTE?” y prosiguió con su propia defensa: “Dijo que los comunistas habían infiltrado el gobierno, la academia y el arte. ¿Mató a alguien? No. ¿Qué hizo además de tener razón?”, en un intento de legitimar su figura.
El comentario de Lemoine no pasó desapercibido y recibió numerosas críticas. Entre ellas, un usuario identificado como @peronmetalero respondió recordándole que “sí existieron ejecuciones en ese marco de la posguerra”. El mensaje planteaba: “Ah bueno, lo que faltaba, defendiendo el macartismo que eran listas negras, censura, interrogatorios por sospechas ideológicas. ¿Mató a alguien? Sí, hubo ejecuciones en juicios ridículos por ‘traición’ y gente que se suicidó por estar en listas negras”. Lemoine replicó, justificando que uno de los casos mencionados no tenía relación directa con McCarthy y acusó a sus críticos de “tergiversar la historia”.
La referencia a McCarthy por parte de una legisladora argentina generó un fuerte debate sobre las reminiscencias de esa era y las implicancias de apoyar figuras históricas controvertidas. El “macartismo” simboliza una época en la que los cuestionarios del Senado comenzaban con la temida pregunta: “¿Eres, o has sido alguna vez, un comunista?”, y el FBI se convirtió en una herramienta clave para vigilar a quienes eran sospechosos de subvertir al gobierno estadounidense. Estas prácticas fueron comparadas con políticas más recientes, como la Ley Patriótica de 2001, que también despertó críticas por limitar derechos civiles en nombre de la seguridad nacional tras los ataques del 11 de septiembre.