La ruptura de la bancada oficial de la Unión Cívica Radical (UCR) dio lugar a la formación de un nuevo bloque en la Cámara de Diputados, denominado “Democracia para Siempre”. Este espacio, impulsado por los referentes radicales Martín Lousteau y Facundo Manes, fue presentado oficialmente este jueves y estará compuesto por 12 legisladores. La nueva agrupación se encuentra presidida por Pablo Juliano, quien tendrá como vicepresidenta a Marcela Coli, mientras que Carla Carrizo ejercerá como secretaria parlamentaria y Manuel García asumirá el rol de secretario general.
El bloque incluye a figuras destacadas como Lousteau, Manes, Juan Carlos Polini, Jorge Rizzotti y Fernando Carbajal, quienes se alinean con la visión del neurocientífico. Además, la bancada incorpora a Danya Tavela, Mariela Coletta y Marcela Antola, representantes de Evolución Radical, junto a Melina Giorgi, que responde al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. La formación de “Democracia para Siempre” se produce en un contexto de creciente tensión dentro de la UCR, que culminó con la fractura de su bloque después de un intento fallido de diálogo por la unidad.
La crisis en el bloque radical se intensificó cuando sectores disidentes solicitaron la expulsión de legisladores como Mariano Campero, Luis Picat, Martín Arjol, Federico Tournier y Pablo Cervi, quienes apoyaron al oficialismo en la ratificación de decisiones polémicas, como el veto a la movilidad jubilatoria y la ley de financiamiento universitario. A pesar de las presiones, los radicales libertarios no solo evitaron ser excluidos, sino que también lograron que el Gobierno les asignara un lugar en la mesa legislativa, donde interactúan con representantes de La Libertad Avanza, el MID y el PRO.
Pablo Juliano, líder de “Democracia para Siempre”, expresó que “había un bloque que estaba roto hace mucho tiempo y sin una conducción”, subrayando la necesidad de enfocarse en los problemas que realmente preocupan a los ciudadanos. Según Juliano, la imagen de Rodrigo De Loredo, presidente del bloque radical, en una reunión con funcionarios del Gobierno, fue el detonante de la fractura. “No queremos vivir más discutiendo la interna del radicalismo, sino que queremos discutir los temas importantes que le importan a los argentinos, a la gente de a pie”, agregó.
En un tono más crítico, Fernando Carbajal, otro de los diputados alineados con Manes, cuestionó la actitud de De Loredo, afirmando que “no podés ir con rodilleras arrastrándote a la Casa Rosada”. Esta tensión interna refleja las diferencias ideológicas y estratégicas que dividen a los radicales en un momento crucial para la política argentina. Aunque el nuevo bloque aún no ocupa presidencias en comisiones, cuenta con una representación significativa en áreas clave como Asuntos Constitucionales, Presupuesto y Juicio Político. Sus votos podrían resultar determinantes en un recinto cada vez más fragmentado, donde cada decisión se vuelve crucial para el futuro legislativo del país.