El Gobierno anunció el cierre definitivo de la empresa estatal Trenes Argentinos Capital Humano (DECAHF), dedicada a la gestión del personal ferroviario. Según la Secretaría de Transporte, la empresa “no tenía funciones que justifiquen su existencia”, y su clausura generará un ahorro de 42.000 millones de pesos anuales. Este ahorro proviene principalmente de la reducción de 1.388 empleados y la eliminación de 23 cargos jerárquicos, quienes percibían sueldos mensuales que oscilaban entre 2 y 4 millones de pesos.
El cierre de DECAHF fue acompañado por la disolución del Instituto Argentino del Transporte, un organismo creado en 2014 que, según fuentes oficiales, nunca llegó a funcionar ni a emitir decisiones o acciones concretas. Ambas medidas fueron publicadas en el Boletín Oficial bajo la Resolución 35/2024. Durante la conferencia de prensa, el vocero presidencial Manuel Adorni y el secretario de Transporte, Franco Mogetta, defendieron la decisión y remarcaron que esta forma parte del plan de reducción del gasto público. “Estamos reduciendo el gasto camino a reducir el déficit por instrucción del Presidente”, explicaron los funcionarios del Gabinete de Javier Milei.
DECAHF, que formaba parte del “holding ferroviario” gestionado en su momento por el exministro de Economía, Sergio Massa, acumuló un déficit operativo de 200 millones de dólares entre 2020 y 2023. En este contexto, Mogetta resaltó las anomalías que se observaron durante la gestión de Alberto Fernández, como la asignación de 180 millones de pesos para la “puesta en valor de obras de arte” en estaciones donde los trenes no operaban, y contratos millonarios para actividades culturales que poco tenían que ver con el funcionamiento del sistema ferroviario. “Contrataron productoras audiovisuales por 80 millones de pesos en 2023 cuando contaban con personal propio para realizar esas tareas”, añadió Mogetta, quien también criticó gastos en catering y la contratación de artistas para obras de teatro en estaciones ferroviarias.
La empresa estatal, una de las cinco subsidiarias de Trenes Argentinos, se encargaba de “afianzar y enriquecer el desarrollo y transferencia del conocimiento y cultura ferroviaria”, así como de la “preservación y difusión del patrimonio histórico documental ferroviario”. Sin embargo, según las autoridades, en la actualidad no brindaba “servicios directos a la ciudadanía”. La estructura sobredimensionada de DECAHF, sumada a la duplicación de funciones con otras empresas ferroviarias, hizo inevitable su disolución en el marco de las políticas de ajuste impulsadas por el Gobierno para reducir el déficit.