Horas después del almuerzo bilateral entre Javier Milei y Donald Trump en la Casa Blanca, el ministro de Economía, Luis Caputo, buscó contener el impacto que tuvieron en los mercados las declaraciones públicas del mandatario estadounidense. En una entrevista televisiva, el funcionario calificó como “confusa” la reacción de los inversores y aseguró que hubo “una interpretación errónea” sobre el alcance del apoyo de Washington a la gestión libertaria. Según Caputo, la reunión en el Salón Oval fue “espectacular”, marcada por el “esfuerzo” de Trump, quien —dijo— llegó “con tan pocas horas de sueño” y aun así fue “muy generoso con su tiempo y con sus dichos”.
Para el ministro, el encuentro bilateral dejó señales que deberían haber sido recibidas de manera más positiva por los mercados. Calificó la reunión con un “10 puntos” y anticipó que “pronto” habrá nuevos anuncios económicos derivados del diálogo con Estados Unidos. Sin embargo, los mercados reaccionaron con fuertes bajas: los bonos argentinos en dólares llegaron a caer hasta 4,5% y las acciones que cotizan en Wall Street también retrocedieron. Caputo sostuvo que el mal clima financiero se generó porque “hubo una confusión en función de que el apoyo del presidente de Estados Unidos iba sólo hasta el 26 de octubre”, lo que —insistió— “no tiene nada que ver con lo que pasó realmente”.
“El apoyo de Trump es un apoyo a la gestión Milei”, afirmó el ministro, al remarcar que el respaldo de la Casa Blanca “no va a estar supeditado sólo por ocho días” ni condicionado a un resultado electoral “de si se gana por dos puntos o se pierde por ocho”. En ese sentido, Caputo destacó que Trump pretendió enfatizar “la alineación de Argentina con Estados Unidos y el soporte que Estados Unidos da al camino económico” del gobierno libertario. “Lo que dijo fue, claramente, que si Argentina sigue en este camino, entonces los vamos a seguir apoyando”, añadió en su intento de corregir el mensaje que había agitado a los mercados.
Las declaraciones de Trump, hechas en una extensa respuesta ante la prensa, generaron ruido por su contundencia y por la aparente mezcla entre las elecciones legislativas del 26 de octubre y los comicios presidenciales de 2027. Consultado sobre la capacidad del Gobierno para sostener reformas “de larga duración”, el mandatario estadounidense sostuvo: “Si Milei pierde, no seremos generosos”. Luego agregó: “Creo que sé con quién va a competir Milei. Es de extrema izquierda, una filosofía que metió en este problema en Argentina”. Minutos antes había dicho que las legislativas serían “una gran elección, vista por todo el mundo”, y que la victoria libertaria era “muy importante”.
La interpretación oficial de esos dichos comenzó a desplegarse rápidamente. Patricia Bullrich remarcó que Trump se refería a la continuidad “de la filosofía” económica del oficialismo, no estrictamente al resultado de las elecciones. Más tarde, el mandatario estadounidense publicó un mensaje en su red Truth para despejar dudas: “Excelente reunión la de hoy con Javier Milei! Está haciendo lo correcto por su país… Javier Milei tiene mi total apoyo. ¡No los decepcionará!”.
Milei replicó ese mensaje en sus redes con un entusiasta “Aquí la opinión de Trump…!!!”. Y antes, en un intento explícito por calmar la incertidumbre política, escribió: “Los argentinos saben que la principal potencia del mundo continuará apoyándonos salvo que volvamos a abrazar al populismo”.
