El banco digital BiBank, anteriormente conocido como Compañía Financiera Interfinanzas, atraviesa un momento clave en su reestructuración: está por concretarse un cambio de control accionario que marcará la salida de su principal socio. Fabio Calcaterra –primo del expresidente Mauricio Macri– dejará el 55% del capital que poseía, dejando atrás el negocio financiero que comandaba desde 2016. La operación, que se anunciaría en los próximos días, se produce en un contexto de transformación del sector bancario argentino, impulsado por el avance de los neobancos y las fintech.
La firma GMC Valores será quien tome el control de la entidad. Esta compañía, que nació en octubre de 2022 tras la fusión de dos grupos económicos con más de 40 años de trayectoria, ejecutó la opción de compra que había acordado. En su presentación institucional, GMC destaca su enfoque en servicios financieros y soluciones de inversión orientadas tanto a empresas como a particulares. Entre sus actividades, se incluye el desarrollo de fideicomisos financieros y la administración de carteras, con el objetivo de “potenciar el crecimiento de sus clientes”. Uno de sus principales socios es Eduardo Savastano, exejecutivo de Citigroup con dos décadas de experiencia en el rubro y reconocido dentro del sector. En paralelo, había trascendido que Savastano analizaba también una posible compra del Banco Masventas, una entidad con fuerte presencia en el norte del país.
Tras la salida de Calcaterra, el segundo accionista de BiBank, Ignacio Sáenz Valiente, aumentó su participación del 10% al 45%, convirtiéndose ahora en el socio más relevante luego de GMC. Sáenz Valiente había ingresado como inversor minoritario, pero su movimiento confirma una apuesta a largo plazo en el banco en medio de un fuerte reordenamiento accionarial.
BiBank nació en 1971 como una financiera enfocada en operaciones mayoristas y obtuvo licencia bancaria en 1976. Fue propiedad del grupo austríaco Creditanstalt AG a partir de 1989, momento en el que cambió su denominación por Banco B.I. Creditanstalt. En 2016, la familia Calcaterra tomó el control, con Fabio como figura central y con una estrategia orientada a reposicionar la entidad con un perfil más digital. En 2022, rebautizó la marca y consolidó su enfoque en banca digital, multiplicando por cinco su valuación en medio de un mercado cada vez más competitivo.
A pesar de estos avances, el banco enfrenta desafíos. El balance del primer trimestre de 2025 reflejó pérdidas superiores a $1.000 millones, tras haber registrado una ganancia de $1.617 millones en el mismo período de 2024. Sin embargo, la entidad sigue apostando a un modelo 100% online antes de fin de año, con foco en pymes y tras inversiones por más de $2.000 millones. Desde su sede en Catalinas, con un plantel de 113 empleados y una participación menor en el sistema financiero (puesto 55 en activos y 53 en depósitos), BiBank continúa trabajando en su transformación. Según la calificadora FIX, aún conserva un “buen potencial de crecimiento” en un mercado que no deja de evolucionar.