La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) llevó adelante este lunes asambleas en aeropuertos de todo el país, en el marco de una medida de fuerza que busca visibilizar la pérdida de poder adquisitivo y las condiciones laborales de los empleados de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). Aunque la actividad comenzó alrededor de las 11, desde la entidad informaron que hasta el mediodía no se habían registrado demoras en los vuelos.
El secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, sostuvo que las asambleas podrían afectar la normalidad de los servicios, pero advirtió que si eso ocurría sería “exclusiva responsabilidad del Gobierno”. A través de su cuenta de X, el dirigente sindical alertó: “Esto no es joda. La seguridad de todos los vuelos está amenazada. La ANAC incumple auditorías internacionales y provoca una grave crisis en el sistema aerocomercial argentino”. Según Aguiar, la falta de personal ha reducido “drásticamente la capacidad de control en 21 aeropuertos del país”.
El sindicalista denunció además “el congelamiento salarial, la flexibilización de las condiciones laborales y los recortes presupuestarios” que, aseguró, “son muestras de la negligencia y la irresponsabilidad de los funcionarios”. En ese sentido, exigió que “se debe reabrir la paritaria sectorial y reparar el daño salarial ocasionado en el organismo”. Aguiar remarcó que “con trabajadores aeronáuticos estresados y fatigados por multiplicidad de tareas, todos los usuarios están en riesgo”.
Por su parte, el coordinador nacional de ATE en la ANAC, Marcelo Belelli, detalló que “más de la mitad” de los 1.500 empleados del organismo “deben recurrir a la multiplicidad de tareas dentro del mismo o desempeñarse en otros empleos porque la supervivencia económica así lo requiere”. Según explicó, “un sueldo promedio en la ANAC está en $1.100.000 o $1.200.000, muy por debajo de lo que ganan las personas que deben ser controladas”.
Belelli también advirtió sobre el éxodo de personal en los últimos años. “En estos dos años de Gobierno, alrededor de 300 a 400 compañeros y compañeras se fueron del organismo, ya sea por jubilaciones, despidos o porque migraron al sector privado, donde pagan mejor que en el sector público”, señaló en declaraciones al portal Data Gremial.
Desde ATE advirtieron que, de no obtener respuestas concretas, podrían profundizar las medidas de fuerza en las próximas semanas. Mientras tanto, reclaman que se garantice la seguridad operacional en los aeropuertos y se dé marcha atrás con los recortes que, aseguran, afectan el funcionamiento de la aviación civil argentina.
