El Gobierno busca calmar al mercado y asegura que “dólares sobran” para intervenir y pagar deuda

En medio de la creciente tensión cambiaria y la volatilidad de los bonos soberanos, el Gobierno nacional insistió en que dispone de los recursos suficientes para sostener el tipo de cambio y cumplir con los compromisos de deuda. “Dólares sobran”, repiten en el Ministerio de Economía, donde aseguran que hay unos US$ 22.000 millones disponibles entre reservas y herramientas financieras para intervenir en el mercado y estabilizar el precio del dólar. La intervención del Banco Central (BCRA) se mantiene activa cuando el tipo de cambio toca el techo de la banda, que actualmente ronda los $1.475, mientras el dólar minorista superó los $1.500.

El ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó la decisión del Gobierno de actuar sin límites para contener la cotización. “Vamos a vender hasta el último dólar en el techo de la banda”, sostuvo el funcionario, quien además destacó dos medidas adicionales que buscan dar respaldo al plan económico. La primera es la negociación de un crédito con el Tesoro de Estados Unidos, cuyo desembolso permitiría afrontar los vencimientos de deuda de 2026, estimados en US$ 4.300 millones. La segunda es la exención temporal de retenciones a las liquidaciones del campo hasta fines de octubre, una medida destinada a incentivar el ingreso de divisas.

A pesar de estas señales, la semana pasada los inversores mantuvieron una actitud cautelosa. Según analistas, sin la intervención del BCRA el tipo de cambio habría escalado más, mientras que el riesgo país se duplicó en pocos días por la venta masiva de bonos soberanos. Para el economista Ricardo Delgado, presidente de Analytica, el escenario es delicado aunque aún controlable. “No estás en una situación de crisis, pero los tenedores de deuda dicen que hay un problema en la acumulación de divisas. Por eso volvió la brecha, se quedó corto el techo de la banda. Lo que falta es conducción política. Podemos tener 25 jornadas muy intensas”, advirtió. Y agregó: “La situación es manejable, pero hay que dar señales claras”.

En los mercados financieros prevalece la percepción de que el desafío del Gobierno pasa por recuperar credibilidad y confianza. “Credibilidad en que lo que se dice se cumple. Confianza en gobernabilidad y poder real”, coinciden los operadores. Si bien el presidente Javier Milei logró durante su primer año de gestión aprobar un paquete de leyes que fue bien recibido por los inversores, la falta de acumulación de reservas genera ahora incertidumbre sobre la sostenibilidad del plan económico.

Un informe reciente de la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba) indicó que, pese a la turbulencia, el sistema financiero mantiene solvencia y estabilidad. Los indicadores del sector se ubican en niveles sólidos: los depósitos en pesos crecieron 4,1% en julio y 62% interanual, mientras que los créditos al sector privado acumulan 15 meses consecutivos de aumento. Sin embargo, la caída de los bonos y la presión sobre el tipo de cambio reflejan que el principal problema no es técnico, sino de confianza.

Con las reservas en la mira del mercado y los ojos puestos en la negociación con el Tesoro estadounidense, el Gobierno apuesta a sostener su estrategia de estabilidad cambiaria. El tiempo, coinciden los economistas, dirá si el plan de Caputo logra convencer a los inversores o si el río revuelto en el que navega la economía argentina se vuelve más difícil de cruzar.