La eliminación del cepo cambiario reconfigura el escenario del mercado inmobiliario, que ya venía mostrando signos de reactivación con un aumento sostenido de ventas y precios. Si bien los primeros días de flotación del dólar —en una banda entre los $1.000 y $1.400— generan cautela, especialistas del sector aseguran que el nuevo esquema podría favorecer un crecimiento sostenido en el mediano y largo plazo. “Las operaciones que se estaban por cerrar sí se ven afectadas. Porque quienes estaban por sacar un crédito van a esperar frente a la devaluación, aunque sea pequeña hasta ahora”, explicaron desde una inmobiliaria de Caballito, dando cuenta del clima de incertidumbre inicial.
El sector inmobiliario, fuertemente influenciado por las expectativas, experimenta un compás de espera mientras se observa la evolución del tipo de cambio. En este contexto, Fabián Achával, referente del rubro, sostuvo que “el levantamiento del cepo como la posibilidad de aprovechar los precios que están históricamente bajos son condiciones que contribuirán a reanimar aún más el mercado”. Coincide Mali Vázquez, directora ejecutiva de la Cámara de Desarrolladores Urbanos (CEDU), quien afirmó: “Sin cepo, el real estate argentino entra en una nueva etapa. Por primera vez en años, el sector puede volver a proyectar con reglas más claras y previsibilidad”.
Uno de los principales cambios que habilita la nueva coyuntura es la posibilidad de volver a pensar en el crédito hipotecario a largo plazo. “Con un sistema financiero que empiece a mirar nuevamente al sector como motor de desarrollo”, explicó Vázquez. Además, destacó que con un dólar unificado “se transparentan los precios, se terminan las distorsiones y se ordena la ecuación entre costo, valor y rentabilidad”. También remarcó la potencial atracción de inversiones tanto locales como extranjeras: “Un entorno sin restricciones es un entorno más confiable”.
Sin embargo, el entusiasmo de mediano plazo convive con las dificultades propias de la transición. Sebastián Loggio, asesor financiero de la desarrolladora Spazios, advirtió que puede haber “un aumento transitorio de la inflación por ajuste de tarifas al nuevo dólar oficial, que impacte en los deudores UVA”. También señaló como posible contratiempo que “quienes estén cerrando operaciones con pesos y/o hipotecarios tengan que recalcular valores” si el dólar se acerca al límite superior de la banda de flotación. Aun así, sostuvo que estos efectos serán temporales y que “va a impactar en la confianza, en la dinamización del mercado inmobiliario y va a apuntalar de ese modo la recuperación de precios”.
Desde la plataforma de financiamiento colaborativo Lendar, Agustín Celia destacó que la salida del cepo “simplificará las operaciones”, aunque reconoció que si el dólar sube y eso se traslada a los precios, podría haber un impacto en las cuotas de los créditos UVA. “Pero al ser un anuncio incipiente, hay que seguir el comportamiento del dólar”, aclaró. En una mirada a largo plazo, fue optimista: “Vemos un escenario en donde los argentinos puedan comprar dólares y no haya trabas para el ingreso de inversiones extranjeras o inmobiliarias”.
