A pesar de que septiembre suele ser un mes complicado para los mercados financieros, este año los inversores argentinos disfrutaron de un cierre positivo. Tanto las acciones como los bonos lograron rendimientos de dos dígitos, impulsados por una serie de factores. Entre ellos, el mejor ánimo global luego de la baja de tasas de la Reserva Federal en Estados Unidos, así como el impacto del blanqueo de capitales, que estabilizó el mercado cambiario y alentó la compra de títulos públicos y acciones argentinas. “Septiembre fue un mes excelente para los activos financieros argentinos”, expresó Melina Di Napoli, Analista de Productos de Wealth Management en Balanz.
Los bonos en dólares fueron uno de los principales beneficiados, registrando ganancias de hasta el 11% en moneda dura, lo que también permitió una reducción del riesgo país, que terminó septiembre en torno a los 1.290 puntos. En cuanto al mercado de acciones, a pesar de una caída del 2,6% en el índice Merval durante la última jornada del mes, el indicador terminó con una ganancia del 3,2%, medido al valor del dólar contado con liquidación. Este desempeño fue significativo, dado que el Merval había tocado sus máximos en la era Milei a mediados de mes antes de perder impulso.
El blanqueo de capitales jugó un papel clave en este escenario. Según el economista Gustavo Ber, “el blanqueo viene jugando un importante papel en la expansión de las valuaciones, de la mano del fuerte crecimiento de los depósitos en dólares”. Este mecanismo no solo oxigena las reservas del país, sino que también estimula la actividad económica a medida que los inversores canalizan sus fondos en el mercado de capitales, generando una mayor demanda por bonos y otros activos financieros. Di Napoli coincidió en que los flujos provenientes del blanqueo fueron un factor determinante en el desempeño de los bonos en dólares, que avanzaron entre un 5 y 9%.
De cara a octubre, los analistas se muestran optimistas, aunque con algunas reservas. En PPI advirtieron que, si bien el Merval retrocedió desde sus máximos, aún parece estar sobrevaluado frente a los bonos Globales, lo que sugiere que la deuda soberana podría tener un mejor desempeño relativo en el corto plazo. “Un Merval de US$1.404, en términos históricos, se condice con un riesgo país más cercano a los 1.100 puntos que a los 1.300 actuales”, señalaron. Mientras tanto, Di Napoli se mostró más confiada en los títulos corporativos que en los soberanos, recomendando bonos en dólares de empresas argentinas con vencimientos largos, como los de Transportadora Gas del Sur y Pampa Energía, que ofrecen rendimientos anuales de entre el 7% y 7.4% en dólares.
En resumen, septiembre trajo sorpresas positivas para el mercado financiero argentino, que logró sortear los desafíos habituales del mes. Con una combinación de factores locales e internacionales, los inversores lograron importantes rendimientos, lo que deja expectativas favorables de cara a los próximos meses.