Las opiniones futbolísticas de Victoria Villarruel, vicepresidenta de Argentina, se han convertido en un tema candente que impacta directamente en el Gobierno. Su defensa a Enzo Fernández por los cantos xenófobos ha generado una serie de reacciones, incluidas las críticas de la propia vicepresidenta a Francia por su “colonialismo” y las disculpas emitidas por Karina Milei. Este miércoles, Villarruel añadió más leña al fuego con una nueva arenga de corte patriótico en sus redes sociales.
“Aunque nos insulten y silben nuestro Himno, Argentina está destinada a la grandeza”, posteó Villarruel en su cuenta de X, en respuesta a la vergonzosa derrota de la Selección Argentina en su debut en los Juegos Olímpicos. El partido fue marcado por incidentes con proyectiles y bombas de estruendo que cayeron sobre los jugadores, así como el corte del video del momento. Aunque Villarruel no especificó a quién dirigía sus críticas, el principal destinatario parecía ser Marruecos, cuya hinchada protagonizó el bochorno, seguido por Francia, el país anfitrión del evento deportivo.
La vicepresidenta continuó con su tono nacionalista, afirmando: “Viva la Argentinidad”. Esta declaración resalta su juego político independiente mientras se mantiene distante de Javier Milei, con quien no ha tenido diálogo desde que la interna del partido resurgió. Por su parte, el Presidente, preparándose para viajar a París invitado por Emmanuel Macron para la inauguración de los Juegos Olímpicos, describió como “no feliz” el anterior tuit de Villarruel sobre Francia. En ese tuit, Villarruel había reivindicado a próceres argentinos de origen africano y criticado duramente a las naciones colonialistas: “Ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir. Basta de simular indignación, hipócritas”.
La controvertida declaración llevó a la secretaria general de la Presidencia a una rápida visita a la Embajada de Francia, preocupada también por su propio futuro y la exclusión de la invitación que su hermano había recibido para el evento deportivo. Este movimiento diplomático, realizado sin la intervención de la canciller Diana Mondino, intentó mitigar las tensiones generadas por los comentarios de Villarruel.
Mientras la familia Milei trataba de reducir la pirotecnia retórica de Villarruel, ella continuó destacando su agenda personal. Desde Catamarca, Villarruel mostró federalismo y tradiciones locales, asistiendo a la Rural y reafirmando su conexión con la “patria ganadera”. En su discurso, la pasión por el fútbol se entrelazaba con una visión nacionalista y geopolítica.
Este conflicto también afectó a funcionarios del gobierno. Milei forzó la salida de un funcionario que sugirió que Lionel Messi debería disculparse por los cantos racistas surgidos entre los aficionados. En las redes sociales afines a Milei, se pidió la expulsión de Julio Garro, exsecretario de Deportes, promoviendo una administración libre de librepensadores.
Durante todo este tiempo, mientras gestionaba las tensiones con la Embajada de Francia, Villarruel mantuvo firme en sus redes sociales el tuit que mostró abiertamente la interna del partido. “Paso por alto y no me ofendo”, dijo la vicepresidenta durante su gira federal por Catamarca, al ser consultada sobre las críticas de Milei a sus publicaciones. “Yo siempre defenderé a la Selección Argentina y a los argentinos”, añadió el martes. Y este miércoles volvió a manifestar su postura.
Con Javier Milei de visita en Francia, Victoria Villarruel, aunque solo por formalidad, quedará a cargo del país.