Peronismo en la encrucijada: dilemas y alianzas ante la Ley de Bases y el paquete fiscal

El peronismo enfrenta decisiones cruciales mientras se acerca el momento de la votación final de la Ley de Bases y el paquete fiscal en la Cámara de Diputados. Con el camino despejado para la aprobación de la versión completa de la Ley de Bases, tal como fue aprobada por el Senado, el oficialismo ha logrado resolver algunas de las disyuntivas internas que podrían haber afectado su posición en la sesión. “Un problema menos”, declaró un referente del bloque Unión por la Patria al confirmarse este acuerdo inicial.

Uno de los puntos de tensión más significativos se centró en las privatizaciones propuestas por Diputados, incluyendo empresas como Aerolíneas Argentinas, el Correo y los medios públicos. Esta discusión dividió al peronismo entre aquellos que apoyaban las modificaciones del Senado para evitar la venta de estas entidades, y quienes preferían mantener su rechazo. El acuerdo entre el oficialismo y los bloques dialoguistas permitió superar esta división inicial, sentando las bases para una postura más unificada de cara a la votación.

Sin embargo, la incertidumbre persiste en relación con el paquete fiscal. Aunque se espera que la mayoría del bloque peronista vote en contra de medidas como el impuesto a las Ganancias y Bienes Personales, hay indecisiones respecto a otros aspectos cruciales, como el monotributo social. En este caso, algunos diputados de Unión por la Patria muestran una predisposición a apoyar las versiones del Senado, que han rechazado ciertas disposiciones del proyecto original.

El debate dentro del plenario también reflejó críticas y preocupaciones sobre la coherencia y la estabilidad jurídica de la ley propuesta. “Esta ley es el paraíso de la inseguridad jurídica y va a terminar en la Justicia”, expresó Vanesa Siley durante las discusiones en comisión. Estas tensiones internas podrían resultar en fracturas dentro del bloque peronista, especialmente en puntos específicos de ambos proyectos legislativos.

Además, la presión política de los gobernadores peronistas, como Raúl Jalil de Catamarca, quien cuenta con el respaldo de varios diputados, y otros mandatarios regionales del norte argentino, agrega una capa adicional de complejidad al panorama legislativo. La reunión reciente de estos líderes provinciales con funcionarios de la Casa Rosada subraya los esfuerzos del gobierno por asegurar el apoyo necesario para la aprobación de ambas leyes.

En resumen, el peronismo se encuentra en una fase crucial donde las alianzas políticas y las decisiones individuales podrían definir el resultado de dos proyectos legislativos clave para la agenda nacional. La votación final en Diputados no solo determinará el futuro de las políticas fiscales y económicas del país, sino también la cohesión interna de una de las fuerzas políticas más influyentes de Argentina.